Capítulo #2: Traición.
Todo lo Malo de su Nueva Era.
La crisis del Imperio alemán empezó a aumentar cada vez más, el precio, los impuestos, todo se empezó a empeorar a tal punto de que el nivel de pobreza de la nación misma se convirtió en algo realmente horrible de ver. Por otro lado, en el poder militar, el Imperio cada vez aumenta su capacidad, para poder tanto atacar, cómo defender a sí mismo de otras naciones. El problema de esto, es que todo el presupuesto que ganaban en el interior de la nación eran usadas para estas cosas. Esto escupió la reputación del General supremo Baviera sobre su gobierno y sobre el Imperio, por lo que en un acto de desesperación, Baviera preparo un discurso para dársela a la ciudad de su gente y tratar explicar el porque todo está pasando.
En un día Viernes, las luces solo apuntaban a Baviera, mientras el se dirigía al salón donde dará sus justificaciones, y espera, que todo vaya bien. Aunque la sociedad en este punto lo único que querían era decapitarlo.
~Lamento mucho lo que está pasando, pero esto es necesario para mantener el Imperio a flote, solo tenemos que observar todo lo bueno que hicimos en estos años de reinado...~ Exclamó Baviera, mientras él escuchaba cómo era abucheado, por su propia gente, por aquellos que aún podían al menos poder comer algo. La pobreza en este punto era demasiado alto.
Baviera, entonces envió a varios guardias para protegerse de los abucheos y de las cosas que su gente lanzaba hacia él. Le lanzaba tomate, madera, metales, e incluso les lanzaban cuchillos. Aún así, Baviera, en un acto de no rendirse y continuar con su discurso para convencer a la gente de su imperio, continúa hablando y justificando él porque sus acciones salvarán el imperio Alemán.
~!Cuando terminemos de evolucionar nuestra tecnología a un nivel totalmente por encima de Todos¡, necesitamos tiempo... les prometo que haré esta nación, ¡EN LA MÁS PODEROSA DE LA TIERRA!~ Dijo Baviera, pero aunque sus palabras se escucharon por todos los ángulos de resonancia, las personas que las estaba mirando, no les importaba y continuaban lanzandole cosas y en uno de ellos dijo lo siguiente:
~¡¡¡NO NOS IMPORTA SER UN IMPERIO PODEROSO!!!, ¡¡¡QUEREMOS QUE MEJORES LA MALDITA ECONOMÍA, MALDITO INFELIZ TERRAPLANISTA!!!.~
Estas palabras por parte de un hombre entre las personas que estaban mirando su discurso, Baviera explotó de Irá, y envío a los guardias y los militares con sus armas de fuego, a matar a todos lo que estaba del discurso. Baviera sabía que lograría su objetivo, sin importar más que nada en el mundo. Tarde o temprano, la gente lo entendería y le agradecería por eso, era lo que él pensaba en este momento.
Luego de la masacre que hizo baviera en este discurso, se dirigió nuevamente, hacía el área principal de armas aéreas. Donde terminó sentándose y esperando a su más confiado amigo, Adolfo Hitler, quién venía de una exploración de nuevas tecnologías que el habría descubierto. Baviera le da un gran abrazo, pues en todo este Caos que le está sucediendo, podía contar con el, con su verdadero amigo. Luego de ello, Hitler le señala a Baviera, un posible artefacto Tecnológico que cambiaría el rumbo de toda su historia y llevarla al Imperio Alemán, a su punto más alto en la cima.
~Es un artefacto que no es de este Planeta, Hermano, lo acabamos de encontrar mientras estuvimos investigando, ¡Es Increíble lo que podríamos hacer con esto!.~ Exclamó Hitler con su voz Arrogante, Baviera asentó, pensando en las posibilidades de que se podía tratar, podría ser un Reloj Rojo?, una Piedra jamás descubierta?... Hitler le señala que vaya con el, y el asegura, que será algo muy emocionante capaz de llevar al Imperio a un Nivel completamente Trascendental de todas las demás tecnologías humanas.
Tras un largo rato de caminata entre ambos, llegaron a un pequeño área militar que estaba resguardada por militares. Y lo dejaron entrar, una vez dentro, Baviera pudo reaccionar lo que había dentro del área, había un Caza (Vehículo Militar de ataque aéreo) muy avanzada con un estilo totalmente diferente a las cazas normales, helicópteros fusionados con aviones, tanques más grandes de los promedios, y sobre todas las cosas una nave en forma de platillo volador.
Baviera, impresionado por todo lo que había visto, decidió tocar cada cosa posible. ~¿Cómo era posible que Hitler y su grupo de investigación ocultaron todo esto a todas las fuerzas militares de su imperio?~ Se preguntó a si mismo, El pensó que posiblemente se tratase de una sorpresa o algo similar, pero decidió continuar viendo cada cosa nueva que habrían creado, y encontrado.
~Hitler, ¿me ocultaste todo esto?, cómo es posible... Yo soy el General de todos, ¡puedo saber todo!...~ Exclamó con asombro y furia. Mientras veía a Hitler tomar un Vaso de Agua.
~...Si, pero eran por buenos motivos, verás, mientras estabas siendo presionada por las personas y la gente del imperio, Yo tuve que ocultar esto, la revelación sobre algo más allá de nuestro entendimiento como seres humanos... haría que la sociedad colapsara.~ Dijo Hitler, mientras aún sostenía su vaso de Agua.
Baviera pensándolo bien y de una manera muy Reflexiva, creía que lo que hizo y lo que le dijo Hitler estaba correcto, y que era lo mejor para todos, y que solamente una cierta parte de la fuerza militar lo supiera, aquello que sea confiable y no revele nada al mundo exterior.
Tras el pasar del tiempo, y que el oscurecer se hiciera notar, Hitler lo invitó a ir a su casa para que conozca a su prometida, Eva Braun. Baviera acepta, y cuando era la hora de ir a su casa, un pequeño cuervo lo atacó Instantáneamente y de la nada, escapando, dejando pensativo a Baviera, que pensaba que posiblemente algo "malo" podría ocurrirle.
Cuando Baviera, llegó a la casa, lo primero que encontró fue a Hitler saludando e invitándole a entrar. Lo cual acepta, y se encuentran con su tal Prometida mencionada, Eva Braun, tras un saludo cálido entre ambos, Pasan a cenar. Durante la cena Hitler hablo de varios temas, qué incluían su odio masivo por los judíos, por su intelecto para encontrar y hacer evolucionar la tecnología de la nación, y lo más destacable, su gran amistad con el jefe supremo Baviera. Resumidamente, fue una buena cena, donde tuvieron buenos momentos, sonrieron, rieron, se conocieron mejor hasta que la cena terminó.
Luego de que haya terminado la cena, tanto Hitler como Baviera se reunieron en el Sótano que tenía en su casa. Hitler le dijo que el tenía el mismo propósito que el, con la diferencia de que el quería llevar a Alemania a un nivel más allá de lo que el razonaba, una completamente avanzando a tal punto, de que quería que Alemania sea dueño de todo el Mundo. Estás palabras de Hitler causaron un gran problema con la mentalidad de Baviera, que si bien compartían el mismo razonamiento, no quería el mundo para si mismo. Solo quería hacer que Alemania pueda ser reconocida como una de las más grandes y mejores Naciones de todos los tiempos.
~¡No!, ¡Lo que planeas hacer es demasiado estúpido!, ¡No cumplirás tu objetivo de esa manera!~ Gritó con irá, pero su voz y su boca fueron tapados por las manos de Hitler, quién estaba mirándolo con desprecio y un cierto grado de enojo. Hitler para evitar que se escuchen más los escándalos, golpeó directamente al estómago del General supremo del imperio, Baviera.
~¡M-M-Maldito!~ Dijo Baviera, ahora ya en el suelo, tratando de respirar por el fuerte golpe, gimiendo de dolor.
Hitler Saca de su cajón, un cuchillo fino (cuchillo cortos y pequeños), mientras lo afilaba y a su vez, tomaba a Agua. Y una cara de desprecio y a la vez de tristeza se veían en su rostro, pensar que tenía que matar al único amigo que tomaba en cuenta todo este tiempo para cumplir sus respectivos objetivos, era algo lo que él, quería ignorar desde siempre. Pero no tenía otra opción.
Hitler se agachó para mirarlo mejor, mientras tenía el cuchillo en su mano izquierda, con sus ojos observada los suyos mientras el aún estaba caído en el suelo tratando de respirar lo más que podía. Baviera apenas podría verlo, tratando de recuperar su cuerpo para poder moverse libremente era algo a lo que él le dificultaba.
~Creeme que a mí también, siento dolor en este momento, pero no me dejas opción...~ Dijo, mientras poco a poco, presionaba el cuchillo sobre el pecho de Baviera que apenas puede caminar.
El tiempo pasó cuando la prometida de Hitler, regresó el sótano, y lo único que veía era el cuerpo de Baviera, Pálido, sus ojos completamente blancos y abiertos, ahí tirado al suelo con la sangre en el suelo, instantáneamente pensó en su responsable....
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